jueves, 27 de noviembre de 2008

Noticia bizarra 2

Esta mañana, como todas, revisé la página de El Comercio (para los que no son peruanos, éste es el diario de mayor circulación en Perú; los que son peruanos saben que esto no es verdad y que el diario de mayor circulación es El Chino) y me topé con una noticia que califica como noticia bizarra.

Aquí les va (el comentario lo dejo para el final):
______________________________________________________________

Empresa holandesa recicla grasa humana para galletas para el Tercer Mundo

22:38
| La fundadora de Irfak, Mieke Smits, explica que su compañía envía los productos a regiones con problemas de alimentación a causa de situaciones de guerra

La Haya (EFE).- La empresa holandesa Irfak recicla la grasa humana sobrante de liposucciones para elaborar galletas y otros productos alimenticios para enviar a países en vías de desarrollo, según reconoce la propia empresa.

El programa de actualidad de la televisión holandesa "Netwerk" ofrecerá hoy un reportaje especial sobre la actividad de esta empresa.

En su página de Internet, la fundadora de Irfak, Mieke Smits, explica que su empresa "recicla grasa humana y la transforma en alimentos que se exportan a países del Tercer Mundo" o a regiones con problemas de alimentación a causa de situaciones de guerra.

Smits explica que, por ejemplo, uno de sus productos, cerrado herméticamente para poder ser distribuido incluso en las situaciones más adversas, está compuesto de un "50 por ciento de grasa humana, otro 50 por ciento de azúcar y una enorme cantidad de vitaminas añadidas".

En una entrevista concedida a la televisión local del sur de Holanda, L1Tv, Smits deja ver el contenido de una bolsa que contiene "la grasa de nuestro primer ganador de nuestra promoción para conseguir donantes".

"La gente puede inscribirse a través de nuestra página de Internet y ganar una liposucción", que se sortea una vez cada medio año, según la web de la empresa.

Irfak colabora ya desde hace dos años con la clínica de cirujanos cosméticos "Van Gerven & Van Iersel", que son los que realizan las liposucciones sorteadas.

Fuente: El Comercio, 27/11/2008

_____________________________________________________________

Buena manera de reciclar recursos naturales (¿la grasa humana es un recurso?), pero bastante rara. El único comentario apropiado lo dijo Charlton Heston en 1973, adelantándose a su época: "Soylent Green is people!" Personalmente, siempre sospeché de las galletas Chomp; incidentalmente, son mis favoritas.

Para los lectores interesados y que sepan holandés (dos conjuntos que probablemente tengan intersección vacía), esta es la página web de la empresa IRFAK: http://www.irfak.org/.

¡Hasta el siguiente post!

sábado, 22 de noviembre de 2008

Miedo


miedo
.

(Del lat. metus).

1. m. Perturbación angustiosa del ánimo por un riesgo o daño real o imaginario.

2. m. Recelo o aprensión que alguien tiene de que le suceda algo contrario a lo que desea.



Cuando eres un niño pequeño, de cinco o seis años de edad, no deberías ver películas de terror. Punto.

Esto lo sé por experiencia propia. De niño vi todas y cada una de las películas y series de terror que la televisión peruana de fines de la década de los ochenta me ofrecía. Algunas escenas quedaron marcadas hasta el día de hoy:

- En Return of the Living Dead (1985), la escena en que el cadáver zombie de una mujer explica que busca comer cerebros porque morir duele (puede sonar inofensivo ahora, pero pongan esa escena en la mente de un niño de cinco años...).

- En Poltergeist (1982) -que, dicho sea de paso, fue co-escrita por Spielberg-, cuando el payaso de juguete ataca a uno de los niños protagonistas y lo arrastra debajo de la cama y cuando uno de los personajes secundarios imagina frente al espejo cómo la carne se despega de su rostro. (Algunos años después, cuando mi abuela me regaló un muñeco de payaso idéntico al de la película, no tuvieron mejor idea que colocarlo justo frente a mi cama, permanentemente mirándome. Más de una vez le cayó un almohadazo bien dirigido.)
- Algunos episodios de la nueva y antigua serie La Dimensión Desconocida (The Twilight Zone), y su canción de opening, que Lovecraft probablemente describiría como pavorosa. Recuerdo especialmente tres episodios:
  • En el primero, una epidemia de gripe se extiende en un pueblo, tras la llegada de un hombre misterioso. Luego de algunas semanas, todo el pueblo está infectado, excepto un habitante que había permanecido en casa durnte todo ese tiempo, sin contacto con el resto. Una noche, todo el pueblo, transformado en monstruos debido a la aparentemente inofensiva gripe, sale de sus casas para matar al único no infectado.
  • En el final de otro episodio, la abuela de una familia termina convirtiéndose en una bruja, pero esto sólo se le revela el espectador, no a los miembros de la familia.
  • Del tercer episodio, sólo recuerdo la frase final: "el monstruo está en el atico". Durante todo el episodio, un grupo de personas había tratado de acorralar al monstruo que habitaba una casa. Al monstruo no se le ve una sola vez en todo el episodio, pero finalmente logran acorralarlo en el ático de la casa. La frase final de esta historia coincidió con la llegada de mi mamá a la casa; cuando me dijo "hola" establecí mi marca personal de salto alto.
Recuerdo también haber visto la serie presentada por Hitchcock (Alfred Hitchcock Presents) y lo que en Perú se conoció como La Hora Macabra (Ghost Story). La canción del comienzo de la primera y la publicidad de la segunda (en canal 9, para los peruanos) eran suficientes para apagar el televisor.



Ahora, Poltergeist, lo confieso, me jodió el cerebro. Probablemente toda mi consecuente fascinación con el terror en forma de cine, literatura, comics (y en la vida real) se la deba a haber visto esa película. Verla, a los cinco años, fue el equivalente al primer fix de una sustancia adictiva (digamos, para ser zanahorias, la primera vez que uno toma Coca-Cola). Me dejó queriendo más.

Pero el efecto no fue inmediato. La primera reacción fue desarrollar un miedo (ver definición al inicio de este post) antes inexistente a la oscuridad, que eventualmente superé, y otro a lo que puede estar detrás de las puertas, detrás de las cortinas, detrás de mí mismo. Este último es un miedo que está bajo control, pero que dudo que algún día desaparecerá. (Y esto lo digo, simplemente, porque, con todo lo improbable que puede ser, realmente existe una probabilidad distinta de cero de que haya algo detrás de esa puerta, o algo detrás de mí. En palabras del gran Kurt Cobain: "Just because you're not paranoid doesn't mean they aren't after you.")

El miedo a lo desconocido e inmaterial se encuentra muy dentro de nosotros y tiene una explicación bastante coherente como mecanismo evolutivo de prevención: si eres un Cro-magnon en búsqueda de comida y te sientes de pronto amenzado por la presencia de un depredador al que puedes oír, pero no ver, entonces es útil que tengas miedo y corras para salvarte. (Aprovecho para decir que, si a alguien le interesa qué hubiese pasado si descendiéramos de los Neanderthal, y no de los Cro-Magnon, lean la trilogía The Neanderthal Parallax de Robert Sawyer.) Pues bien, el hecho es que Poltergeist llevó este instinto a un nivel de overdrive dentro de mí y, cuando recuperó sus niveles normales, me dejó con un apetito insatisfecho por el terror.

Ahí comenzó mi fascinación por las películas de zombies, por ejemplo. A esta época pertenecen los clásicos Night of the Living Dead (1968) y sus secuelas (los remakes saldrían muchos años después), de George A. Romero; Re-Animator (1985), de Stuart Gordon; Pet Sematary (1989), basada en el libro del mismo nombre de Stephen King, publicado en 1983; The Evil Dead (1981), dirigida por Sam Raimi, el que sería director de la trilogía de Spider-Man veinte años después. Cuando descubrí que en la serie de videojuegos House of the Dead podía poner en práctica los años de experiencia visual eliminando zombies, inmediatamente me volví asiduo jugador: descubrí que pocas cosas relajan más después de una semana de trabajo que apuntar directamente a la cabeza de un zombie. ¿Un poco salvaje y violento? Sí, lo admito. Pero inmensamente gratificante.

Años después, hurgando en una librería de la cadena Gandhi en Ciudad de México, descubriría a H.P. Lovecraft y el mito de Cthulhu. Ya antes, en el colegio, había leído Carrie de Stephen King, pero Lovecraft realmente entendió cómo generar terror: muestra lo mínimo indispensable, suficiente como para crear en el lector la sensación de que lo que se le está describiendo es un elemento que se encuentra fuera de la realidad conocida. Lovecraft no habrá sido un revolucionario en la literatura, pero sí llegó a convertirse en el ícono del género de horror. Si les interesa, lectores, recomiendo dos de sus más conocidas historias: At The Mountains of Madness (1936) y The Thing on the Doorstep (1937).

Durante años, he podido ver plasmados en las películas y libros de horror parte de los miedos de mi infancia. Algunos de estos miedos siguen hasta hoy, más controlados, digeridos y pensados, pero todavía presentes. Mi fascinación con el horror responde a una búsqueda, fuera de los sueños, de la presencia de lo surreal en la vida normal. Las situaciones improbables y sus efectos en una persona, un grupo o en toda la humanidad es un tema que no está restringido sólo al género de horror, pero que sí ha sido explorado (notablemente, por Romero) utilizando sus técnicas. Fuera del horror, el mejor explorador de situaciones improbables que he encontrado es José Saramago, escritor portugués, ganador del premio Nobel de Literatura y autor de novelas como Ensayo Sobre la Ceguera (sobre una epidemia de ceguera), Las Intermitencias de la Muerte (sobre un país donde la gente deja de morir) y Ensayo Sobre la Lucidez (sobre un país donde todos votan en blanco en las elecciones presidenciales). (En Ensayo Sobre la Ceguera, curiosamente, no es difícil hacer comparaciones con los eventos típicos de películas de zombies.)

El tema del horror es amplio y el de lo surreal, aún mas. Todavía me falta mucho por ver, desde Fellini hasta las películas gore italianas, y mucho por leer. El hambre -no de cerebros, sino de terror, en este caso- está lejos de haber sido calmado.

Para terminar, los dejo con una de las frases más famosas de Lovecraft, la primera línea de The Call of Cthulhu:

"The most merciful thing in the world, I think, is the inability of the human mind to correlate all its contents. We live on a placid island of ignorance in the midst of black seas of infinity; and it was not meant that we should voyage far."

Las preguntas para ustedes, lectores, son esta vez: ¿Qué películas de terror recuerdan especialmente? ¿Libros? ¿Páginas del Necronomicon?

martes, 14 de octubre de 2008

Noticia bizarra

De cuando en cuando me topo con alguna noticia que me llama la atención de manera especial por ser distinta a las noticias usuales sobre accidentes de buses interprovinciales, huelgas y desgracias políticas a las que uno se acostumbra si nació en tierras peruanas. Estas noticias van más allá de lo ordinario y cotidiano para mostrar realidades distintas, a veces abominables, a veces cómicas y muchas veces surreales. Varias veces he pensado que estas historias, escondidas entre la avalancha de noticias que recibimos a diario, podrían servir como punto de partida para una noveleta o un cuento corto.

Por todo esto, inauguro una nueva sección en el blog: la noticia bizarra. Cada vez que encuentre una noticia que crea que cae en esta categoría, la postearé (en cualquier momento me caen los ninjas de la RAE) aquí para que compartan. Si ustedes encontraran alguna noticia que les impacte de esta manera, siéntanse libres de hacerlo saber a través de un comentario.

Aquí va, pues, la primera noticia bizarra:

Traficantes arrojaron vivos al mar a 13 africanos inmigrantes

13:38 | Uno de los sobrevivientes dijo que los traficantes nigerianos arrojaron a sus compañeros de viaje porque 'daban mala suerte'

Roma (EFE).- Las pesquisas realizadas en Italia que han supuesto el arresto de cinco presuntos traficantes de personas han desvelado la dramática travesía de un grupo de africanos que fueron maltratados, torturados y trece de ellos arrojados vivos al mar.

El fiscal de Siracusa (Sicilia), Ugo Rossi, encargado del caso calificó hoy de "espeluznantes" los detalles del viaje.

El pasado 11 de setiembre desembarcó en las costas de Sicilia una barcaza con 59 inmigrantes, la mayoría nigerianos, quienes dieron cuenta a las autoridades de la muerte de 13 personas durante la travesía, lo que llevó a la policía a detener a Tony Waychey, de 26 años, como presunto jefe de la banda de traficantes.

Las investigaciones que siguieron llevaron hoy al arresto de otros cuatro de los viajeros, quienes hasta ahora se encontraban en el centro de acogida temporal de Cassibile (Sicilia) junto al resto de los inmigrantes.

Rossi indicó que los supervivientes explicaron en los interrogatorios cómo los traficantes arrojaron vivos, uno a uno durante la travesía, a 13 de sus compañeros de viaje porque "daban mala suerte".

Según el fiscal, el motivo de arrojar vivos a los inmigrantes era que "faltaban víveres", pero los traficantes se inventaron la excusa de la superstición para aligerar la abarrotada barcaza.

Los inmigrantes testificaron que los traficantes les ataban, pegaban y les obligaban a no dormir para que cantasen oraciones tribales con el fin de alejar a los demonios.

A quien se oponía o protestaba por la falta de comida o agua, según el relato de los inmigrantes, se le acusaba de estar poseído por el diablo y de dar mala suerte y se le arrojaba por la borda.

En uno los testimonios recogidos por la fiscalía, un superviviente contaba cómo su amigo Osamede, al que conoció en Libia, donde les reunieron antes de zarpar, un día se sintió mal y empezó a delirar.

"A la mañana siguiente, Osamede ya no estaba en la barca y las siguientes noches desaparecieron también dos de sus amigos", se lee en el testimonio.

El fiscal añadió que la "montaña de pruebas" que han recogido serán suficientes para una dura condena contra los cinco nigerianos detenidos.

Fuente: El Comercio, 14/10/2008

jueves, 2 de octubre de 2008

Ludo ergo sum

Una de las características del ser humano que lo ha convertido en uno de mis animales favoritos (debajo del ornitorrinco y del kiwi, pero definitivamente por encima del caballo) es su capacidad para inventar juegos.

Jugar no es una actividad exclusiva de los humanos; de hecho, es un útil mecanismo para que las crías de muchas especies se entrenen en las técnicas que les permitirán sobrevivir. Basta ver cualquier documental donde primero enfocan a las crías de tigre cándidamente persiguiéndose entre ellos y en la siguiente toma están almorzando la cebra a la que acaban de saltarle encima.

Sin embargo, a veces jugamos, aparentemente, por el mero hecho de jugar y la satisfacción que produce completar una tarea -"ganar el juego"- cuya dificultad radica en que tiene que realizarse siguiendo un conjunto de reglas cuya finalidad es que la compleción del juego no sea una tarea trivial, o sea, que el juego no sea fácil y aburrido.

(Como nota aparte, uno tendería a pensar que sólo los seres humanos juegan por satisfacción, pero resulta que los delfines acostumbran a crear anillos de aire bajo el agua y jugar con ellos. Entren aquí para ver un video de esto. Si van al delfinario del hotel Los Delfines y tienen suerte, verán a Yaku y Wayra haciendo lo mismo.)

Bueno, y si de inventar reglas se trata (y de romperlas, también), el ser humano se lleva el premio. Lo interesante es que, a excepción de algunos, la mayoría de nuestros juegos más populares son en esencia sencillos. El fútbol, por ejemplo, consiste en que dos equipos, de once personas cada uno, traten de meter la pelota en el arco del equipo opuesto sin usar las manos, a excepción del jugador llamado "arquero", que puede usarlas, y que tratará de impedir el ingreso de la pelota en el arco de su equipo. El golf consiste en tratar de meter la pelota en dieciocho hoyos, golpeándola con un palo, en el menor número de golpes. El ajederez ... bueno, ahí tienen un juego complicado. Personalmente, prefiero las damas (pun intended).

Sin embargo, los juegos de los que quería tratar en este post son los juegos propios, los que cada uno de nosotros inventamos, con más frecuencia durante nuestra niñez. Me refiero a los juegos improvisados, los que inventaban con sus primos un sábado por la tarde, en casa de la abuela. O los juegos que inventaba uno cuando estaba solo, como caminar sin pisar las líneas de la vereda o resistir tanto como se pueda debajo del agua en la piscina. Algunos de los juegos que inventamos de niños se quedan con nosotros, a veces mutan con el tiempo, y llegan a formar parte de nuestra personalidad.

Lo de no pisar las líneas de piso al caminar es un juego que todavía practico, igual que el de aguantar la respiración bajo el agua, pero hay un par de juegos muy personales que vengo jugando desde que era un pipiolo (como diría Cristina).

El primero es jugar con los números que uno se encuentra en la calle: en las placas de los carros, en los números de casas, en los números de teléfono de avisos publicitarios y en todo cuanto uno pueda fijarse. (Para esto, ser peatón es una ventaja, pues así uno pone la vida en manos del chofer de turno y se dedica a menesters importantes, como leer, pensar en el almuerzo, en que va a llegar con las justas para ver Dr. House y en jugar con los números.)

Usualmente, lo que hago es sumar dígitos de un golpe vista y, tras probar si la suma de sus dígitos es divisible entre tres, saber si el número también lo es. A veces, el cerebro pide más reto y se prueba la divisibilidad entre 7 y hay que complacerlo, porque el cerebro tiene siempre prioridad. Ya cuando uno pone más empeño, se cambian las sumas por multiplicaciones y ahí la velocidad baja un poco. (Si uno es físico, además, los números sirven para calcular las finanzas personales, lo cual inevitablemente lleva al dolor en el fuero interno.)

Si uno busca un reto, podría intentarse algo como lo siguiente (gracias, http://www.xkcd.org):

pero confieso que no he llegado a extremos tales. (A ver, pues, si son tan valientes traten de factorizar números arbitrarios de cuatro dígitos en la cabeza.)

Algo curioso es que, a través de los años (no hay muchos, ah, sólo veinticinco) me he dado cuenta de que jugar con los números de la calle es un hábito desarrollado individualmente por varias de las personas que conozco. Incidentalmente, la mayoría de personas que conozco son ingenieros o físicos ...

El segundo juego que me acompaña desde la niñez es un poco más complicado de explicar. Consiste, básicamente, en imaginar situaciones poco probables y cómo actuaría en ellas. Por ejemplo, cuando estaba en el colegio pensaba qué haría si un grupo de terroristas armados entrara a los salones (advertí que eran situaciones poco probables ... aunque en los ochentas, en Lima, quién sabe). Veamos: obviamente, resistirse estaba fuera de consideración, así que había que imaginar dónde esconderse. ¿Baños? No, muy fácil. ¿Almacenes? No, si yo fuese terruco, buscaría ahí más rehenes, o metería ahí a los más rebeldes. El mejor sitio, después de cuidadoso análisis, resultó ser unos estrechos conductos que cruzaban el techo del salón y donde cabía, como máximo, una persona. El plan no era perfecto, claro, porque sin agua ni comida, mucho no podía durar ahí, pero algo era algo.

De lo anterior pueden concluir dos cosas:
  • siempre quise seguir los pasos de John McClane (yippee ki-yay, motherfucker) de Die Hard; y
  • me aburría como bestia en el colegio (al menos antes de cambiarme).
Curiosamente, el autor de xkcd aparentemente tiene el mismo tipo de fantasías con situaciones improbables:

Así que, donas y cavallers (estando en Valencia, hay que aprender un poquito de catalá), ¿inventaban ustedes juegos en su chiquitud? ¿Si lo hacían, en qué consistían? ¿Los siguen jugando?

martes, 23 de septiembre de 2008

¿Tu batea o la mía?

Esta imagen la encontré en Geekculture y me pareció demasiado buena como para no ponerla aquí:
La imagen me recuerda un poco a mis pesadillas: en ellas todo es exactamente igual a como es en la vida real (bueno, hay que llamarla de alguna forma), pero un detalle insignificante, incompatible con el resto, hace que me de cuenta de que algo está mal (cosas sutiles como una persona diestra escribiendo con la mano izquierda o el perro del vecino viviendo en mi casa) y que lo que sea que esté sucediendo tiene que ser no-real.

Como no me han hecho una propuesta como la de la figura de arriba, me siento un poco más seguro, por ahora, de no ser un cerebro en un tanque con agua, tipo Futurama:


Pero uno nunca sabe, claro. Lo único bueno de ser un cerebro conectado a un gran sistema de simulacion (una especie de Second Life, pero con mejor resolución... y con olores y sabores) es que podría algún día decir "I know kung-fu", como Neo. Por supuesto, sin brazos ni piernas, no serviría de mucho.

En fin, no se le puede pedir todo al Flying Spaghetti Monster...

viernes, 19 de septiembre de 2008

Poesía urbana sobre ruedas

Entre artículos, gráficas, FORTRAN y trámites de visa (me voy a Valencia en diez días), últimamente no he tenido tiempo de escribir. Culpo, por supuesto, al gobierno - creo que Sofocleto (¡grande, maestro!) creería que esta es buena idea.

A falta de suficiente tiempo para escribir un post más largo -espero poder hacerlo este fin de semana-, aquí va algo que tenía en la cabeza desde hace unas semanas.

Todos los limeños hemos visto las inscripciones pintadas en la retaguardia de combis y taxis y que incluyen frases célebres como

- "Guíame, Sr. de Muruhuay"
- "En memoria de mis padres"
- "Britni y Yonatan"

y joyas literarias afines. Bueno, se me ocurrió compilar una lista (ya lo dije, me gustan las listas) de las mejores de estas frases. Mi corta lista por ahora incluye tres de estas maravillas. Deslúmbrense, a continuación, con estas perlas urbanas:

- "El buen amante nunca se enamora" (este taxista dobletea como gigoló)
- "El caballero de la noche" (combi manejada por un heroíco -y guatón- chofer)
- "Muchas gracias antepasados" (generalización del arriba mencionado "en memoria de mis padres", porque uno nunca sabe qué pariente muerto le va a jalar las patas)

Espero que la lista crezca con el tiempo, pero dudo que encuentre tamaña proeza lírica en el sistema de transporte público de Valencia.

A ver, lectores, ¿qué frases del limeñísimo transporte público se han quedado para siempre grabadas en su corteza cerebral?

viernes, 5 de septiembre de 2008

U2, Paris 1987

En una de mis búsquedas en YouTube, encontré este video de U2 tocando With or without you en Paris, en 1987, el mismo año de la salida de su disco The Joshua tree. La calidad del video no es la mejor (muchachos, era 1987), pero es más que suficiente para que se den cuenta de que ésta tiene que ser una de las mejores presentaciones en vivo de U2, al mismo nivel que el concierto en Belfast en 1983 (y la famosa línea de Bono, "This is not a rebel song, this is Sunday bloody sunday").



A la mitad de la canción, Bono detiene la música y hace un pausa para dirigirse al público porque habían lanzado gas lacrimógeno en las primeras filas. Un minuto después, retoma With or without you desde donde se había quedado. Definitivamente, la mejor interpretación en vivo que he visto de esta canción.

viernes, 29 de agosto de 2008

Mis diez momentos favoritos del cine

Lo admito, me gustan las listas. Hago listas para muchas cosas; algunas funcionales -como la lista de pendientes de trabajo, lista de cosas que hacer hoy- y otras tales que completarlas son más o menos un propósito de vida, e.g. la -siempre creciente- lista de libros que quiero leer (cuatrocientas entradas y creciendo), la lista de cosas que quiero hacer antes de morir (perseguir un tornado, buscar al último lobo de Tasmania y cosas por el estilo), la lista de lugares que quiero visitar, entre otras.

También me gustan las listas hechas por otras personas, o por instituciones, como por ejemplo el Big Read de la BBC, la lista de los 50 mejores cortos animados o las del American Film Institute. Es en el espíritu de estas últimas (recomiendo que inviertan un poco de tiempo en verlas - sólo sigan el link) que decidí hacer una lista de mis diez momentos favoritos del cine. Vale decir que, como ésta es una lista de confección enteramente personal, está basada únicamente en las películas que he visto y no es en absoluto exhaustiva - osea, hay un montón de películas seguramente excelentes que yo no he visto y que, por lo tanto, no tuvieron oportunidad de entrar en mi lista. (Por supuesto, como buen fan de las listas, tengo una de las películas que quiero ver.)

Aquí, entonces, van, en orden creciente de preferencia:

10.
Película: Where Eagles Dare
Año: 1968
Director: Brian G. Hutton
Escena: Richard Burton revelando a los generales Nazi sus planes, con dos o tres plot twists totalmente inesperados, planeados por él para engañar a los oficiales enemigos. Esta película, protagonizada por Richard Burton y Clint Eastwood, es la mejor del género de películas de guerra que he visto. La historia está situada en la Segunda Guerra Mundial y trata sobre una misión especial de un pequeño grupo de Aliados, encabezado por Burton, para rescatar a un general estadounidense que ha sido capturado por los alemanes y al cual tienen cautivo en una fortaleza en los Alpes. La escena en cuestión ocurre hacia el final de la película y es la culminación de la intrincada trama.



9.
Película: Breakfast at Tiffany's
Año: 1961
Director: Blake Edwards
Escena: Audrey Hepburn tocando la guitarra, sentada en el marco de su ventana, mientras canta Moon River. Siempre había querido ver esta película y, cuando la encontré, de casualidad, perdida en una pila de DVDs en un Sanborns (un cadena de bazaares en México), por fin pude hacerlo. El filme, basada en el libro homónimo de Truman Capote, tiene todo el ambiente de los sesentas (la música à gogo, la decoración con círculos de colores) y resultó menos inocente de lo que esperaba. Esta escena es mi favorita, porque muestra no a la Hepburn fiestera y excesiva que se ve durante la mayor parte de la película, sino a la chica tranquila, vestida de manera sencilla, melancólica.



8.
Película: The Legend of 1900
Año: 1998
Director: Giuseppe Tornatore
Escena: El duelo entre el protagonista virtuoso del piano, de nombre 1900 (nombre completo, Danny Boodman T.D. Lemon 1900, porque fue encontrado por el obrero Danny Boodman en un caja de limones de marca T.D. Lemon, en el año 1900), y el orgulloso pianista de jazz de New Orleans, Jelly Roll Morton. 1900 ha vivido toda su vida en un crucero de lujo transatlántico y aprendió a tocar piano cuando niño, de manera autodidacta. Debido al carácter inusual de 1900, éste no entiende de qué se trata el duelo hasta el final del mismo, cuando demuestra toda su capacidad en el piano.



7.
Película: Schindler's List
Año: 1993
Director: Steven Spielberg
Escena: Final de la película. El empresario Nazi Oskar Schindler (un Liam Neeson en la mejor actuación que le he visto) ha salvado a docenas de judíos de ser enviados a los campos de concentración, dándoles empleo en su fábrica. Ante la inminente llegado del Ejército Rojo ruso, Schindler debe huir. En la noche de su partida, todos sus empleados judíos, a los que salvó de la muerte segura, se reúnen para agradecerle y para decirle que, para ellos, él no es un criminal, a pesar de ser miembro del partido Nazi. Ante esto, en una de las escenas más emotivas del filme, Schindler se conmueve y lamenta públicamente no haber podido salvar a más personas.



6.
Película: Dead Poets Society
Año: 1989
Director: Peter Weir
Escena: La película trata sobre un grupo de jóvenes estudiantes en una prestigiosa preparatoria estadounidense y sobre cómo el nuevo maestro de Literatura, con métodos inusuales de educación, les enseña a no dejarse guiar únicamente por los libros, a tener una opinión propia y a disfrutar un poco más de la vida. Los nada ortodoxos métodos de enseñanza de Keating -un excelente Robin Williams veinte años más joven- no son aprobados por la dirección de la preparatoria y, luego de culpársele indirectamente del suicidio de uno de los alumnnos, es despedido. La escena en cuestión es la última de la película, cuando Keating ya ha sido despedido y la clase tiene un nuevo profesor de Literatura. Buena película, en la tradición de historias sobre la transición de adolescente a hombre.



5.
Película: Before Sunrise
Año: 1995
Director: Richard Linklater
Escena: El teleférico. Ok, confieso que me gusta una buena película romántica. Ojo, sólo una buena, no cualquier tonta comedia romántica (que sirven, a veces, para pasar el rato, pero para nada más). Sin embargo, lo que Linklater hizo con Before Sunrise la convirtió, creo que junto a la legendaria Love Story, en una de las mejores películas modernas del género. El filme comienza en un tren a Viena, donde un joven turista (Ethan Hawke) comienza una conversación con una pasajera desconocida (Julie Delpy) y al llegar a la estación le propone pasar el día juntos, visitando la ciudad, antes de que cada uno siga su camino. Ella acepta y lo que sigue es una serie de caminatas por la ciudad, visitas a lugares conocidos por ella desde su infancia y conversación de dos extraños que se gustan. La escena es un teleférico, poco después del inicio del recorrido de Viena. Esta película es para todo aquel que esté buscando una película romántica inteligente.



(No encontré video de esa escena en Youtube, así que puse esta otra.)

4.
Película: Before Sunset
Año: 2004
Director: Richard Linklater
Escena: Celine (Julie Delpy) cantándole un vals compuesto por ella a Jesse (Ethan Hawke), acerca de la noche que compartieron hace nueve años. En esta segunda película, nos enteramos de que los protagonistas no se han visto desde la noche que compartieron en Viena en Before Sunrise y que, después de haber pasado por relaciones y matrimonios, no han encontrado nada que se le pareciera a la conexión que tuvieron esa noche. Sus horas juntos, hace nueve años, los marcaron de tal forma que Jesse escribió un libro al respecto y Celine compuso esta canción. (Si alguna vez una chica hace algo parecido por mí, caigo redondo.)



3.
Película: Casablanca
Año: 1942
Director: Michael Curtiz
Escena: Esta película es un clásico y en la lista de las cien mejores películas compilada por el American Film Institute ocupa actualmente el segundo lugar (por debajo sólo de Citizen Kane). Al club nocturno de Rick Blaine (Humphrey Bogart), ubicado en Casablanca, Marruecos, llega Ilsa Lund (Ingrid Bergman), ex-amante de éste, ahora casada con un hombre perseguido por los Nazis. Ilsa pide ayuda a Rick para conseguir cartas de salida de Casablanca hacia EEUU, a lo cual Rick se niega al principio, todavía despechado por la desaparición repentina de Ilsa, hace varios años. Mi escena favorita ocurre a la llegada de Ilsa al club de Rick, cuando le pide al pianista -que conoció a ambos cuando todavía eran novios- que toque As Time Goes By (You must remember this: / A kiss is just a kiss, a sigh is just a sigh. / The fundamental things apply / As time goes by.) La cámara entonces encuadra el rostro de Ilsa durante algunos segundos, sin diálogo, mientras imaginamos que está recordando la época en que ella y Rick todavía estaban juntos. Admito que en ese momento me enamoré de Ingrid Bergman.



2.
Película: Nuovo Cinema Paradiso
Año: 1989
Director: Giuseppe Tornatore
Escena: Otra película de Tornatore (vean The Legend of 1900 arriba). El nombre de la película es el de la sala de cine del Giancaldo, Sicilia, pequeño pueblo italiano donde transcurre la historia. La mayor parte de la película se cuenta en retrospectiva: el protagonista, Salvatore di Vita (Jacques Perrin), ahora un director de cine, recuerda su niñez en el pueblito italiano y el tiempo que pasaba en el Cinema Paradiso, ayudando al cambiador de rollos de película, amigo y mentor, Alfredo. Los recuerdos se precipitan cuando le llega la noticia de la muerte de éste y debe romper la promesa que le hizo de nunca regresar a Giancaldo, ya que, según Alfredo, su destino era más grande que el pequeño y olvidado pueblito. Alfredo deja como regalo a Salvatore un rollo de película. Mi escena favorita es la última del filme, cuando Salvatore regresa a Roma y ve la película que le dejó Alfredo: un pastiche de todas las escenas de besos que tuvo que censurar de las películas a pedido del cura del pueblo.



1.
Película: Man of La Mancha
Año: 1972
Director: Arthur Hiller
Escena: El Quijote cantando Impossible Dream a Dulcinea. Esta película es un musical, adaptado del original de Broadway. Ahora, hay pocos musicales que me gusten -Moulin Rouge!, The Sound of Music- y éste es mi favorito, por mucho. La película la descubrí cuando me la prestó, hace varios años, un pariente cercano, diciéndome que era una de sus preferidas. Cuando la vi, entendí por qué. Man of La Mancha es la historia de Miguel de Cervantes y de su creación, Don Quijote de La Mancha. Cervantes (Peter O'Toole) es encarcelado por la Inquisición junto con su asistente y, en prisión, cuenta la historia de Don Quijote al resto de encarcelados, quienes poco a poco se identifican con él y con la historia. En mi escena favorita, Don Quijote es interpelado por su amada Dulcinea (una hipnotizante Sophia Loren), que rechaza las intenciones del Quijote. Cuando Dulcinea le pregunta por qué sigue insistiendo en sus aventuras y en ver en ella más de lo que es -la dueña de una posada-, Don Quijote responde con Impossible Dream, la canción emblemática del que tiene sueños posiblemente futiles, la consigna arturiana de la búsqueda de lo sagrado, sin importar cuán difícil sea.



Listo, esas son mis diez escenas favoritas (hasta ahora). Pensé en algunas otras escenas y otras más fueron sugeridas por amigos, por ejemplo: Yoda diciéndole "do or do not, there is no try" a Luke durante su entrenamiento (Star Wars Episode V: The Empire Strikes Back); Beatrix Kiddo escapando del ataúd enterrado, con el tema de L'Arena de Ennio Morricone como fondo (Kill Bill vol. 2); los cientos de hojas con la frase "all work and no play, makes Johnny a dull boy" en The Shining; Amélie Poulain viendo el video que le mandó su viejo vecino en Amélie; el final de Back to the Future I, con el DeLorean volador; John McClane (Bruce Willis) disparando con la pistola escondida en su espalda, cerca del final de Die Hard; Dorothy cantando Somewhere Over the Rainbow en The Wizard of Oz; y varias otras más. Pero mis favoritas son las diez de la lista.

Ahora viene la pregunta para ustedes, lectores cinemeros: ¿cuáles son sus escenas favoritas del cine?

sábado, 23 de agosto de 2008

Baila o mueres

Hace un par de semanas, saltando de canal en canal de TV en una noche de sábado tranquila, me topé con el que se ha convertido en el programa líder en su horario: Bailando por un sueño, transmitido por Panamericana Televisión. Decidí ceder a mi morbo (lo cual, admito, sucede más a menudo de lo que resulta recomendable) y verlo un rato, osea, cinco minutos. (Mi morbo quedó satisfecho rápidamente.) Durante esos minutos caí en cuenta de que esta modalidad de programa de entrenimiento ya la había visto antes, pero no exactamente de esta manera, sino crudamente deformada, y no en televisión abierta, sino en la película de 1987 The running man, protagonizada por un joven Arnold Schwarzenegger.

La pregunta es, claro, ¿cuál es la conexión entre el programa de entrenimiento de los sábados por la noche y la película ochentera? Veamos.

Bailando por un sueño es una franquicia internacional del gigante mexicano Televisa que también está presente en Colombia, Argentina, El Salvador y Costa Rica. El programa cae en la categoría de programas concurso à la American idol gringo, sólo que los participantes (soñadores, en el argot del juego), en lugar de cantar, bailan, y lo hacen acompañados por una pareja miembro de la farándula local (un famoso). Por lo demás, el sistema es muy similar: hay una ronda de elección inicial para escoger a los que serán participantes del programa, hay un jurado que evalúa su desempeño y la competencia transcurre a lo largo de varias fechas de eliminatorias donde se descartan, progresivamente, a las parejas menos votadas por el jurado y por el público televidente.

Los participantes de Bailando por un sueño entran al concurso para poder, en caso resulten ganadores, cumplir su sueño (de ahí el nombre, perspicaz lector). Algunos de los sueños son (datos extraídos textualmente de la página web oficial del programa):

- fundar una ONG en Iquitos para ayudar a gente de escasos recursos económicos a salir adelante en la vida
- poder celebrarle a su esposa la boda religiosa que nunca pudo por problemas económicos
- estudiar la carrera de Ciencias de la Comunicación para ser una profesional y poder darle una vida digna a su hijo
- poder ser una profesional y estudiar la carrera de Diseño para adquirir una casa propia para su familia
- lograr la independencia económica para poder criar a sus hijas
- fundar su propia academia de baile para poder repatriar y darle estabilidad económica a sus hijos

Hasta aquí, todo bien. Dejando de lado lo ilusorio de algunos de estos propósitos, son, sin embargo, nobles, de superación personal y de ayuda. Conseguir, bailando, los recursos económicos para realizarlos es sin duda una forma tremendamente inusual de hacerlo, pero al menos los sueños no son cuestión de vida o muerte, ni de diferencia entre curarse o no de una enfermedad grave. ... ¿O sí lo son? Estos son los sueños de otros tres participantes:

- poder brindarle un tratamiento médico y posiblemente una operación a su tía minusválida por poliomelitis
- operarse los ojos para no quedarse ciega y poder seguir luchando para criar a su hijo de 6 años
- poder pagar las cirugías reconstructivas de la piel del vientre de su esposa peruana, que sufre un cuadro de necrosis
- poder pagar la costosa operación para extirpar un tumor en el útero a su madre

La cosa se pone más seria, entonces. La salud de la madre, la esposa y la tía dependen -atención con esto- de qué tan bien baile el participante. En otras palabras, la mujer que está perdiendo la vista la perderá si no baila una cumbia suficientemente bien; y la madre del participante con tumor uterino no podrá operarse si éste no quiebra suficiente la cadera bailando una salsa.

No sé ustedes, pero yo encuentro este espectáculo macabro.

Tan macabra como la trama de The Running Man. Dirigida por Paul Michael Glaser (Starsky, en la serie setentera Starsky and Hutch), la película es una adaptación del libro del mismo nombre escrito por el reconocido escritor estadounidense Stephen King y publicado en 1982. La premisa es que en el año 2017, en un futuro distópico (algún día postearé sobre literatura distópica, que es una de mis preferidas), el protagonista, Ben Richards, necesita dinero para compar las medicinas que su hija, gravemente enferma, requiere. A falta de otros recursos, y para evitar que su esposa continúe prostituyéndose, Richards decide participar en uno de los inmensamente populares juegos que organiza y televisa la Federación de Juegos. Éstos tienen como característica común someter a los participantes a pruebas crueles que despiertan el morbo de la audiencia, lo cual les vale su amplia popularidad. Los juegos incluyen, por ejemplo, hacer correr a un hombre con problemas cardíacos en una faja para probar su resistencia o nadar con cocodrilos. Richards participa en el juego más popular de todos, The running man. En éste, los participantes son declarados enemigos del estado, se les da doce horas de ventaja y deben huir de un grupo de mercenarios que busca cazarlos y matarlos. Con cada hora que pasa, cada concursante gana $100 si permanece vivo, $100 más por cada policía o cazador que mate y $1 millardo (mil millones) si sobrevive durante treinta días.

El paralelo entre The running man y Bailando por un sueño es evidente. Claro, los métodos de este último no son tan crueles ni apelan al morbo (excepto al mío, tal vez) del expectador para ganarse la audiencia como los del primero, pero, con la popularidad de la que gozan este tipo de programas en la actualidad -y lo redituable que resultan para los productores- y tomando en cuenta que, para retenerla, es muy posible que tengan que agregar elementos cada vez más novedosos y arriesgados, entonces no es del todo inconcebile que realidades distópicas como la de The running man sea la evolución natural del inofensivo Bailando por un sueño.

Así que olvídense de títulos profesionales, de libros y discusiones académicas. Si quieren ser capaces de sobrevivir en el futuro, aprendan a bailar cha-cha-chá.

Vémosnos!

martes, 19 de agosto de 2008

El correo del pollito mecánico

A principios de año estaba en Ciudad de México, visitando el departamento de Física de un centro de investigación muy conocido por allá. Como en toda institución de este tipo, existe, claro, una lista de correo para los estudiantes, donde se pueden avisar de cursos, suspensiones de clases, charlas, partidos de fútbol, almuerzos y, de vez en cuando, de alguna noticia relevante.

Un día, sin embargo, abrí mi bandeja de entrada y recibí, con el encabezado de esta lista, el que se convertiría en uno de los correos más bizarros -y cague de risa- que me han enviado. Inmediatamente después de leerlo, y cuando dejé de reírme, supe que tenía que guardarlo para la posteridad. Aquí va, textualmente, para su disfrute:

Asunto: [Estudiantes] pollo mecánico
Fecha: Wed, 16 Jan 2008 11:41:43 -0600

"Mil disculpas para quien no le interese este mensaje.

Vendo pollito mecánico de uso -poco uso- en perfectas condiciones.

Anexo fotografia reciente.


Pido 12 pesos (nota: aprox. 4 lucas) x él, pero podemos negociarlo.

Saludos.


ech."

¡Jajajaja!

P.D. No se olviden de pasar por el post del Dr. Zoidberg, justo debajo de éste.

sábado, 16 de agosto de 2008

Dr. Zoidberg dice...

Sí, dos posts en un día; ustedes pensarán "¿este tipo no tiene nada mejor que hacer?" Y la respuesta que les doy es "no". (Bueno, sí, pero ya me cansé de trabajar y el sábado debería ser día libre.)

Este post es cortito y tienes que responder a una pregunta: ¿qué está diciendo el Dr. Zoidberg cuando cae al agua?

Si ganas, no te harás acreedor a nada, pero te sentirás mejor contigo mismo por haber sido más ingenioso que el resto de los concursantes, que, de ahora en adelante, serán conocidos por ti como los perdedores. Si eso es suficiente incentivo para ti, adelante, campeón(a).

Así que: ¿qué está diciendo el Dr. Zoidberg cuando cae al agua?

Publicación del ganador: sábado 23 de Agosto

Actualización (23/08/2008): el ganador es, por darse cuenta de la naturaleza intrínsecamente cuántica del concurso .... Luciano. Según él, Zoidberg está diciendo "
MEESA GOIN HOME!!!", justo como cierto personaje innecesario de Star Wars: The Phantom Menace. La frase va de acuerdo con el aura de perdedor nato que rodea al Dr. Zoidberg (vean Futurama). ¡Felicitaciones!

Impresiones finales del Simposio

El XVII Simposio Nacional de Física acabó ayer (vean el post sobre el primer día más abajo). Durante toda la semana, profesores y estudiantes de Lima y provincias presentaron conferencias y ponencias. El programa no me llamó mucho la atención, así que después del primer día sólo entré a una charla más, que resultó ser la repetición del contenido de un libro de texto sobre el Modelo Estándar (la teoría que explica cuáles son las interacciones fundamentales de la Naturaleza) y, ayer, a la mesa redonda de clausura del Simposio.

En la mesa redonda me enteré de dos sucesos. Primero, la página web de la Sociedad Peruana de Física (SOPERFI, organizadora del Simposio) había sido hackeada por alguien que había escrito una grosería en ella. Segundo, y mucho, mucho más grave, me enteré que habían robado, en los auditorios del Simposio, la laptop de un expositor invitado chileno. De todos los congresos, escuelas y talleres a los que he tenido la suerte de asistir (que no han sido muchos, pero sí varios), éste es el único en el que un incidente así ha ocurrido. La única palabra que se me ocurre es: inaceptable.

La mesa redonda en sí me dio la impresión de una reunión de sindicato de trabajadores. La falta de rigidez en las formas y modos que caracteriza a la actividad de los físicos (e.g. la jerarquía muchas veces horizontal, la muy cómoda ausencia de código de vestimenta, etc.) no debería traducirse en una excesiva familiaridad en las presentaciones públicas de algunos miembros de la comunidad de físicos nacionales. En mi opinión, esto le resta seriedad al ejercicio de la actividad.

Lo que rescato de la mesa redonda es la intervención del Presidente de la SOPERFI, no por forma, sino por contenido. Este hombre al parecer sí busca activamente la continua mejora de las actividades de la Sociedad que dirige, evidenciada principalmente en la invitación de expositores traídos del extranjero, e hizo notar que los actores de estas mejoras deben ser los miembros de la comunidad de físicos del país. Sin embargo, la inercia que hay que romper es tan grande, que el trabajo por delante es uno de varias décadas.

viernes, 15 de agosto de 2008

Rebuild of Evangelion

Un amigo me pasó ayer el primer OVA (Original Video Animation, en otras palabras, película corta de anime) de "Rebuild of Evangelion". Para aquellos que, como yo, vieron la serie original de TV de Evangelion y las películas durante su adolescencia (1995-96), "Rebuild of Evangelion" les resultará interesante. El proyecto, desarrollado por Studio Khara y Gainax (que creó la serie original de Evangelion), cuenta nuevamente la historia, agregando elementos nuevos (en el segundo OVA, por ejemplo, se promete la aparición de las unidades EVA 04, 05 y 06, que no aparecieron en la serie original de los 90s) utilizando animación completamente nueva que incluye efectos por computadora (CG, Computer Generated). Estos últimos se han introducido en la animación tradicional de forma adecuada y no es muy notoria la diferencia entre los dos estilos de animación: el tradicional y el CG.

El proyecto consistirá de cuatro OVAs, de los cuales sólo ha salido el primero, que ha sido ya fansubeado (es decir, que ya tiene subtítulos en castellano agregados no por profesionales, sino por fans de la serie). Los cuatro OVAs serán:

1. Evangelion 1.0: You Are (Not) Alone (01/09/2007)
2. Evangelion 2.0: Division (2008 o comienzos del 2009)
3. Evangelion 3.0 (sin fecha)
4. Evangelion: Final (sin fecha)

Para la cuarta y última entrega, se promete un final alternativo al confuso y abierto final que tuvieron la serie de TV y las películas. Habrá que esperar para saber qué se trae entre manos Gainax esta vez.

miércoles, 13 de agosto de 2008

Frank Miller y la ciudad del pecado

No recuerdo exactamante cuándo comencé a leer comics, pero sí recuerdo cuáles fueron los primeros que leí: las traducciones al castellano de los comics de Disney y las historietas ochenteras de Condorito (las buenas, las de Pepo, antes de que a Condorito lo publicara una empresa estadounidense y perdiera el alma). (Todavía tengo algunos de esos; para ser totalmente honesto, durante mis viajes a México en el 2006 y 2007 me llevé parte de mi colección de Condorito. La costumbre puede más que el peso de las maletas, supongo.) Después vinieron comics de Transformers (las traducciones de la publicación de Marvel Comics) y He-Man (vean el post más abajo para revivir su infancia de manera transtornada), que, ahora que lo pienso, todavía deben existir dentro de alguna caja.

Lo que sí recuerdo bien es cuándo comencé a coleccionar comics de manera, digamos, pseudo-profesional (¡claro, como si fuera una profesión!). Tenía alrededor de trece años y nos juntábamos un grupo de adolescentes obsesivos (lo de adolescente ya pasó, lo obsesivo siempre queda) todos los sábados en casa de uno de nosotros, que hábilmente había aprovechado nuestra enfermedad para meterse unos billetes al bolsillo e importar comics de EEUU. Comencé con Spider-Man y X-Men; luego también abarqué Batman y Superman. En algún momento hasta hacía que me los enviaran directamente a mi casa. Como verán, realmente me metí en lo de coleccionar comics.

Como intuirán por el título, este post tendría que ser acerca de Frank Miller. Paciencia, ahorita llegamos a eso. Corría el año 96 o 97 y mi afán de coleccionar comics estaba en su apogeo. En uno de los sábados de shopping, encontré un volumen de varios números compilados del comic de Daredevil (un trade paperback, en la jerga) titulado Born Again, dibujado por David Mazzucchelli y escrito por un tal Frank Miller. (Daredevil es el superhéroe ciego de la Marvel que viste de rojo y que interpretó Ben Affleck hace unos años en una película que, aunque mediocre, no me disgustó.) Born Again era diferente a todo lo que había leído hasta entonces. En lugar de hacer de la acción y las habilidades superhumanas el tema central de la historia, Frank Miller desarrolló a los personajes de la misma manera en que lo haría un novelista, pero utilizando, además, viñetas. Dejé de coleccionar activamente comics hace ya varios años, pero, de entre todos los que guardo (y guardo todos), ese tiene un lugar especial.

Un poco de historia del personaje central del libro: Matt Murdock es un abogado que, cegado en la niñez en un accidente de tránsito que agudizó su sentido del oído y su orientación, se entrenó a sí mismo para defender Hell's Kitchen, una zona medio abandonada de Nueva York, usando para esto su alter ego, el superhéroe Daredevil. Born Again empieza cuando la ex-novia de Murdock, convertida en drogadicta y ex-actriz porno, revela al líder mafioso, Kingpin, el hecho de que Murdock y Daredevil son uno solo. Al contrario de hacer lo que el lector de comics esperaría -es decir, atacar directamente a Murdock-, Kingpin se toma su tiempo y destruye progresivamente la vida del abogado. Primero congela sus cuentas de banco, luego hace que pierda su licencia para ejercer el derecho y finalmente termina destruyendo su casa. Murdock, sin trabajo, sin dinero, sin casa y reducido a vagar las calles y dormir en un cuarto infestado de ratas, termina siendo apuñalado por un hombre vestido de Papá Noel el día de Navidad. Lo salva de la muerte una monja, que lo cuida durante su recuperación y a quien Murdock reconoce, por la forma de la cruz que lleva puesta, como su madre. La historia termina con Murdock recuperado y trabajando en un restaurante de Hell's Kitchen como cocinero, nuevamente reunido con su novia, a quien perdona. El último panel de Born Again lo muestra del brazo con ella, caminando sonriente en las calles de Hell's Kitchen, el hombre que cayó hasta lo más bajo y volvió a nacer.



Después de Born Again, Miller escribiría y dibujaría en 1986 la miniserie Batman: The Dark Knight Returns, para DC Comics, la cual cambiaría la imagen de Batman para hacerla lo que es hoy - sombría, inteligente y muchas veces perturbada. El Batman de Frank Miller es uno que ha tenido que recurrir a métodos extremos para tratar de mantener el orden en Gotham y que debido a ello se ha convertido en opuesto directo al boyscout Superman. Una vez más, Miller hace un trabajo impecable al desarrollar la psique de su personaje principal: un Bruce Wayne, ya cincuentón, obsesionado con ganar la batalla contra el crimen en Gotham y que, sintiendo que perdía la pelea, tuvo que ir más allá en sus métodos. (Un poco lo que DC Comics haría años después con el Batman de la miniserie Kingdom Come pintada por el cotizado Alex Ross usando gouache, una especie de acuarelas.)



Pero la que es para muchos (este blogger, inclusive) la obra maestra de Miller ha sido la colección de historias que ha publicado desde 1991 hasta el 2000, bajo la etiqueta de Sin City, y que ha sido recopilada en trece volúmenes:



1. The Hard Goodbye
2. A Dame To Kill For
3. The Babe Wore Red and Other Stories
4. The Big Fat Kill
5. Silent Night
6. That Yellow Bastard
7. Daddy's Little Girl
8. Lost, Lonely, & Lethal
9. Sex & Violence
10. Just Another Saturday Night
11. Family Values
12. Hell and Back (A Sin City Love Story)
13. Booze, Broads, & Bullets

Todas las historias ocurren en la ficcional Basin City, mejor conocida simplemente como Sin City. Esta es una ciudad violenta, corrupta y oscura, llena de personajes que se mueven en el inframundo -ex-criminales, matones, mafiosos, algunos policías honestos, políticos corruptos, prostitutas- y cuyas historias se entretejen a lo largo de los trece volúmenes. Leer Sin City después de haber leído Spider-Man es una experiencia comparable a manejar un poderoso Mustang Shelby sesentero en vez de tu confiable y cómodo Volkswagen Beetle. Así de distinto. (Sin menospreciar a Spider-Man, que es uno de mis personajes favoritos.)

Sin City es un tour de force, lectura obligatoria para cualquiera que aprecie a los comics y la novela gráfica por lo que son: la forma moderna de contar nuestros mitos, de escribir nuestras ilíadas y odiseas. Miller ha creado personajes tan bien trabajados que perduran en la memoria del lector, sin necesidad de sacrificar elementos del comic de acción, para producir un universo atractivo para cualquier lector casual de comics, pero que ofrece mucho más para el que busca algo distinto.

En el 2005, Miller y Robert Rodríguez (El Mariachi, Desperado, Planet Terror) escribieron, produjeron y dirigieron una muy buena adaptación al cine de Sin City. La película conserva el estilo film-noir que tienen los comics: filmada en blanco y negro, con una impresionante fotografía y edición, y un reparto que incluye actores como Bruce Willis, Benicio del Toro y Mickey Rourke (y una inolvidable Jessica Alba interpretando a la bailarina exótica Nancy Callahan.) La película adaptó That Yellow Bastard, The Hard Goodbye y The Big Fat Kill. Dos secuelas están confirmadas y Miller se encuentra escribiendo nuevas historias expresamente para ser incluidas en éstas.

Después de Born Again, el nombre de Frank Miller ya comenzaba a sonar fuerte dentro del mundo de los comics y las novelas gráficas. Después de The Dark Knight Returns, su talento era ya ampliamente reconocido y luego de Sin City adquirió la categoría de maestro que comparte con el inglés Alan Moore (Watchmen, V for Vendetta, From Hell) aunque, personalmente, prefiero el trabajo de Miller.

No he encontrado algún lugar en Lima donde vendan los comics de Miller, pero es posible que existan (hace años que salí del circuito de coleccionistas, así que posiblemente existan nuevos lugares de compra y venta). Si alguno de ustedes conoce de uno de estos lugares, avisen. Por ahora, si se quedaron interesados, les recomiendo que busquen en la red. Nunca falta aquél que ha escaneado y subido los comics como servicio a la comunidad.

Leyeron ustedes comics durante su infancia o adolescencia? Alguno de ustedes llegó a coleccionar una serie? Alguno de ustedes sigue haciéndolo?

lunes, 11 de agosto de 2008

De simposios y ponencias

La semana pasada mi asesor me propuso presentar una ponencia (noten la aliteración, por favor) en el XVII Simposio Nacional de Física, que se está llevando a cabo del 11 al 15 de Agosto en la PUCP. Evidentemente, acepté y, la verdad, de buen grado. A pesar de los muchos comentarios que había escuchado -negativos la mayoría, hay que decirlo- sobre los simposios y congresos nacionales de Física, siempre me han gustado las oportunidades para interactuar con una audiencia más grande y de intentar ordenar mi trabajo de manera que sea fácil y rápidamente digerible por personas que son expuestas a él por primera vez y/o que son ajenas al área. Además, casi siempre es posible entrar a una charla sobre un tema del que conozco virtualmente nada y pasar de ignorante a la categoría de persona-con-idea-general. (Esto me ocurrió el primer día del Simposio, en la presentación de Richard Moscoso sobre cuartos de control en estudios de grabación. También me ha ocurrido antes, más de una vez, en charlas sobre películas delgadas. Extraño, pero cierto.)

Algunas cosas que me molestaron: el atraso de una hora y media en el programa del primer día, la falta de asistentes durante la sesión de la mañana, el nivel demasiado divulgativo de algunas presentaciones, la mediocre preparación de algunos moderadores y los cambios en el programa de expositores que fueron realizados a último momento y sin avisarles. Todos estos son errores que, aunque parecen menores, marcan una diferencia clara con la forma en que se organizan este tipo de eventos en países conocidos por tener un desarrollo sólido en las ciencias. El criollismo peruano y la informalidad a la que nos tiene acostumbrados es uno de los obstáculos que será necesario superar si es que la ciencia en el país ha de alcanzar estándares internacionales.

Como dato curioso, durante la (para mi gusto, innecesariamente prolongada, pero por lo demás, adecuada) ceremonia de inauguración, los organizadores y asistentes cantaron el himno nacional. Me queda la duda sobre si esta es la costumbre en todos los eventos nacionales de Física.

Mi ponencia (de título "Relaciones de dispersión modificadas y neutrinos astrofísicos de alta energía") la hice sobre el trabajo que realicé en México en el 2006 y 2007 bajo la supervisión de Omar y Alberto, mis asesores en México y Lima. Como no estaba seguro del background que la audiencia tendría sobre física de partículas, y en particular sobre neutrinos, dediqué varias diapositivas -en retrospectiva, más de las que debía haber dedicado- a explicar el mecanismo de oscilación de neutrinos y a deducir la probabilidad de cambio de sabor, es decir, a explicar los rudimentos teóricos que iba a necesitar para mostrar el desarrollo de mi trabajo. Como resultado, me quedé sin tiempo para explicar con detalle los resultados de nuestro trabajo. En fin, a planear mejor los tiempos y considerar mejor la audiencia para la siguiente presentación. El resto de las exposiciones del Grupo de Altas Energías de la PUCP, a cargo de Edith y Leo, me parecieron muy claras, bien preparadas e interesantes.

El Simposio dura hasta el viernes y hasta entonces voy a entrar a algunas de las conferencias y ponencias. Hoy (martes) exponen dos profesores de la PUCP: Pancho de Zela, sobre su trabajo en desigualdades de Bell, y Roland Weintgärtner, sobre películas delgadas. La primera la he escuchado antes, en versión extendida, pero tengo curiosidad por saber cuál es el estado de la investigación en óptica cuántica fuera de la PUCP. El patrón que he detectado durante mis años de clausura como estudiante de Física es que en el país se hace poca Física fundamental, de la variedad popularmente conocida como ¨pura" y dentro de la que caería el trabajo en óptica cuántica que ha desarrollado Pancho.

Espero escribir un post más sobre el Simposio hasta el viernes, para evaluar como transcurrió. Por ahora, esto es todo. Vémosnos!

domingo, 10 de agosto de 2008

So Long, and Thanks for All the Fish

He estado releyendo la serie de libros de Douglas Adams, "The Hitchhiker's Guide to the Galaxy", que creo que caen bajo la categoría de "comedia de ciencia ficción". Originalmente, la serie fue transmitida en forma de radionovela, en 1978, a través de BBC Radio. Más adelante, y debido al éxito que tuvo, se hicieron adaptaciones a la televisión, comics y, en su forma más difundida, a una serie de cinco libros, denominados por el autor "una trilogía en cinco partes". Las cinco partes, en orden cronológico de aparición son:

1. The Hitchhiker's Guide to the Galaxy
2. The Restaurant at the End of the Universe
3. Life, the Universe and Everything
4. So Long, and Thanks for All the Fish
5. Mostly Harmless

Descubrí los libros en algún momento entre 1998 y el 2000, cuando estaba en los últimos tres años de secundaria. Mi entonces profesor de Física, Mr. Olive (británico radicado en Perú con ciertas tendencias agresivas hacia sus congéneres humanos) había leído los libros y mencionaba de vez en cuando algunos de los elementos más característicos del universo de Adams: el pez de Babel, que uno se introduce en la cavidad auditiva, que se alimenta de las ondas cerebrales de los interlocutores y excreta una traducción de las mismas inteligible por su huésped; la toalla del viajero (del hitchhiker), su herramienta más útil y, después de muchos viajes y mugre acumulada, el hábitat de civilizaciones microscópicas avanzadas; el número 42, que es la respuesta a la pregunta de la vida, el Universo y todo; y varias cosas más.

Como los libros eran difíciles de encontrar en Lima, busqué si alguien se había dado el trabajo de transcribirlos o escanearlos y de subirlos a Internet. Afortunadamente, algún alma caritativa (léase, desempleada) lo había hecho. Bajé la transcripción de los libros y comencé a leerlos, directamente de la pantalla de la computadora, a lo largo de las semanas siguientes. Como nota aparte, no recomiendo esto... después de dos o tres horas de lectura, tenía dolores de cabeza memorables. (La lectura de un libro completo en la compu no la repetiría hasta años más tarde, con "Calculating God", de Robert Sawyer. ) Me parece recordar que leí los tres primeros libros y parte del cuarto.

Hace poco, Cristina, una amiga que vive en Canada, vino de visita a Lima y me trajo de regalo un par de libros: 1984, de George Orwell, y un compendio, en un solo volumen, de los cinco libros de "The Hitchhiker's...". Asi que, con motivo del regalo, y como realmente nunca acabé de leer los cinco libros, me he propuesto leerlos ahora. Ya leí los tres primeros y esta mañana comencé el cuarto. Realmente, Douglas Adams llegó a dominar el humor inteligente, que sacado fuera de contexto puede sonar a veces absurdo, pero que dentro de la continuidad del libro resulta simplemente hilarante.

Los dejo con el prólogo del cuarto libro, "So Long and Thanks for all the Fish":

"Far out in the uncharted backwaters of the unfashionable end of the western spiral arm of the Galaxy lies a small unregarded yellow sun.

Orbiting this at a distance of roughly ninety-two million miles is an utterly insignificant blue-green planet whose ape-descended life forms are so amazingly primitive that they still think digital watches are a pretty neat idea.

This planet has -or rather had- a problem, which was this: most of the people living on it were unhappy for pretty much of the time.

Many solutions were suggested for this problem, but most of them were largely concerned with the movements of small green pieces of paper, which is odd because on the whole it wasn't the small green pieces of paper which were unhappy.

And so the problem remained; lots of the people were mean, and most of them were miserable, even the ones with digital watches.

Many were increasingly of the opinion that they'd all made a big mistake in coming down from the trees in the first place. And some said that even the trees had been a bad move and that no one should ever have left the oceans.

And then, one Thursday, nearly two thousand years after one man had been nailed to a tree for saying how great it would be to be nice to people for a change, a girl sitting on her own in a small café in Rickmansworth suddenly realized what it was that had been going wrong all this time, and she finally knew how the world could be made a good and happy place. This time it was right, it would work, and no one would have to get nailed to anything.

Sadly, however, before she could get to a phone to tell anyone about it, the Earth was unexpectedly demolished to make way for a new hyperspace bypass, and so the idea was lost, seemingly for ever.

This is her story."

Si pueden conseguir algún libro de Adams, háganlo. Los recomiendo fuertemente. Nos vemos!

miércoles, 6 de agosto de 2008

He-Man políticamente incorrecto (gracias, Edgardo!)

Hace un tiempo descubrí, por casualidad, los doblajes que un mexicano de nombre Edgardo Morales hacía de la serie ochentera de "He-Man y los Amos del Universo" de Hannah-Barbera que vi en mi, también ochentera, infancia. La mezcla de acento mexicano, humor negro y total falta de reparo por buen gusto hace de los doblajes de Edgardo un mate de risa. Pocas veces me he desternillado de risa viendo una película o un corto (o leyendo) y ésta es una de esas veces.

Les dejo links a algunos de los videos, alojados en su página web, web.quekura.com.

También pueden encontrarlos en Youtube. En su página, Edgardo ha colgado otros videos, ya no de He-Man, sino de "El auto fantástico", otras series, películas y un par de grabaciones propias.

No se ofendan con los videos, les dije que son mate risa, pero pueden caer como de mal gusto!

42

Recién leí en Wikipedia que si se busca, en Google, "the answer to life, the universe, and everything", la calculadora da como respuesta 42. Qué genial. Maestro, Douglas Adams.

lunes, 4 de agosto de 2008

Primer post

El propósito de este blog (potencialmente, al menos) es servir, primero, como registro de mis avances, retrocesos y valses de mi investigación y, segundo, como depositario de mis divagaciones que suelen incluir, pero no se limitan a, libros, gente, películas y, en general, intentos de explicación del mundo. En pocas palabras, intentaré usar el blog como bloc de notas para mi cerebro.

Veremos cómo resulta eso.

Hapax legomenon, el nombre del blog, es una palabra que ocurre una sola vez en un texto, o en la obra de un autor dado (vean Wikipedia). Suelen ser útiles para dictaminar la autoría de un texto. La elección del nombre del blog se relaciona con este uso.

4:33 a.m. en mi reloj. Recomiendan dormir; vamos a ver si se puede.